Que se venga el clásico

Racing está preparado y a la expectativa de lo que se le vendrá ante Independiente. Más allá del significado siempre especial y particular que tiene el Clásico de Avellaneda, el equipo intentará usar el juego como una oportunidad para volver a tomar impulso en la presente Copa de Liga luego del último resultado adverso. Será una oportunidad más que promisoria para que el plantel comandado por Juan Antonio Pizzi vaya en busca de un triunfo que le permita no sólo obtener una gran alegría grupal y generar lo mismo en todo el pueblo racinguista, sino también posicionarse de nuevo con expectativas ciertas de clasificación a la etapa final por la disputa del trofeo.

La mañana de entrenamiento de hoy fue la última antes del trascental compromiso y aunque el DT aún no entregó precisiones oficiales sobre el equipo, se sabe la nómina de convocados para el juego. Ellos son Gabriel Arias, Gastón Gómez, Matías Tagliamonte, Fabricio Domínguez, Iván Pillud, Eugenio Mena, Juan Cáceres, Joaquín Novillo, Lucas Orban, Mauricio Martínez, Nery Domínguez, Kevin Gutiérrez, Aníbal Moreno, Tomás Chancalay, Leonel Miranda, Ignacio Galván, Matías Rojas, Héctor Fértoli, Lorenzo Melgarejo, Enzo Copetti, Maximiliano Lovera, Nicolás Reniero e Iván Maggi. El tercer arquero de la Academia ingresó a la lista a último momento en lugar de Cvitanich, debido a que el delantero fue sometido en la tarde de hoy a un test de coronavirus y la prueba entregó un resultado positivo.

Además, se confirmó que los jugadores se concentrarán en el hotel habitual para el plantel en la Capital Federal, pero con una diferencia sustancial con respecto al pasado reciente, que va de la mano de las nuevas recomendaciones realizadas a nivel protocolar tanto por la AFA como por la LPF. La delegación académica se reunirá en la concentración el día del partido cerca del mediodía para almorzar y luego esperar la salida por la tarde hacia el Cilindro. 

En la práctica matutina previa al juego que comenzará mañana a las 21 en el Estadio Presidente Perón, hubo ejercicios de movilidad incial para los jugadores y luego tareas de definición y de pelota parada. Los únicos futbolistas que desarrollaron rutinas diferenciadas a la actividad del resto del grupo fueron Sigali, Díaz, Schelotto y Garré, que trabajaron en el gimnasio y luego en kinesiología.