En Racing se sabe que el resultado de anoche no fue el esperado. Pero al mismo tiempo se tiene la claridad para entender que más allá de lo acontecido adentro de la cancha ante Central Córdoba, el camino dentro del actual torneo es largo y lo más importante se apoya entonces en el hecho de adquirir una regularidad basada en un juego cada vez más cercano a la idea que se busca concretar. Y con esa premisa basada en que las cosas pueden hacerse mejor es que los académicos encararon esta tarde la sesión de trabajo posterior al partido de anoche en el Cilindro. La sesión se basó en recuperar el físico tras el esfuerzo realizado, ya que el desafío que se le viene al equipo en la fecha siguiente demandará estar en la mejor forma posible para enfrentar a Boca Juniors como visitante el próximo domingo por la noche.
Debido a que la premisa de la tarde fue hacer hincapié en la recuperación, la práctica llevada a cabo en la cancha auxiliar del estadio constó de tareas regenerativas para los futbolistas que jugaron más de 45 minutos ante el equipo santiagueño. De manera paralela a esta actividad, el resto del plantel realizó ejercicios de movilidad, circuitos de pases, duelos individuales con la pelota en distintas variantes y un bloque final de fútbol reducido de siete contra siete con apoyos externos.
Los únicos profesionales que se entrenaron de manera diferenciada son aquellos que siguen con su recuperación tras haber sufrido distintas lesiones. De esta forma Licha, Pillud, Galván y Cáceres hicieron una sesión incial de fisioterapia, para luego encarar trabajos personalizados en el gimnasio y más tarde hacer lo propio en el campo de juego.
Este jueves la Academia volverá a entrenarse por la mañana en Avellaneda. Se viene un nuevo clásico y Racing ya trabaja para volver a entregar lo mejor adentro de la cancha.
(Prensa Racing Club)
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