Inclusión sin fronteras ni barreras | Racing Club

Integrar. La clave está ahí. Todo pasa por esa palabra. Como concepto constructor de lazos, como puente que acorte las distancias puertas adentro y fronteras afuera, como sentimiento que derribe prejuicios y como fuerza generadora de acciones que permitan transformar la realidad para volverla más equitativa. Si conceptos tan enriquecedores pueden surgir luego de una charla conjunta, imaginar un futuro de cooperación mancomunada apoyado en esas bases resulta tan como emocionante esperanzador. Es por eso que no sorprende para nada la afirmación de cierre a cargo de Estefanía Piazza: «Sé que participaremos de acá en más en cuanto evento de Racing Integrado». Y lo que dice una de las referentes futbolísticas del club coincide con el pensamiento generalizado de la gente representante del departamento institucional orientado a la contención y al desarrollo de la gente con discapacidad. Lo virtual en este caso permitió generar algo muy real. Por eso en tiempos en los que la distancia social aparece en el horizonte general como una de las premisas fundamentales a tener en cuenta para la vida, no puede pasar inadvertido el hecho de que el fútbol haya reunido a las personas.

La iniciativa tuvo el efecto buscado una vez más. Con la idea de poder acercar las historias de vida de sus integrantes y también de poder dar a conocer el trabajo que se realiza desde el área del club que nuclea todos los temas relativos a la discapacidad, se recurrió a la alternativa de generar un encuentro virtual por Zoom entre Racing Integrado junto a exponentes del fútbol académico actual. Primero llegó el turno de Gabriel Arias junto a Darío Cvitanich como representantes del equipo masculino y en esta oportunidad aparecieron en escena dos de las principales figuras que tiene el plantel femenino como lo son Pepi Piazza y Luciana Bacci. La conexión racinguista generada en el ciberespacio se extendió por más de tres horas y tuvo de todo lo necesario para ser considerado como una de esas ocasiones que perduran en la memoria. Porque si resulta estimulante entender las motivaciones de las chicas que con su esfuerzo llegaron a una Primera cada vez más profesional y que lucha por una igualdad tanto de condiciones como de derechos, también resulta emocionante escuchar y entender los relatos cargados de autosuperación esgrimidos por parte de las jugadoras que representan al equipo de futbolistas con discapacidad. La esperanza se ve de la misma forma, aunque sea con distintos ojos.

Candela y Danila manejaron los hilos virtuales del equipo de Racing Integrado durante la charla para placer tanto de Piazza como de Bacci, que escucharon con atención detalles precisos al respecto de la conformación del área institucional así como el trabajo que realiza para con la comunidad con discapacidades desde hace más de dos décadas tanto en Villa del Parque como en Avellaneda. Las jugadoras profesionales se sorprendieron al descubrir que sus colegas también se desempeñaban como defensoras y les entregaron algunas anécdotas de sus días iniciales en los que el fútbol significaba tanto un espacio de disfrute como de resistencia. Y también hubo tiempo para las referencias comunes que dejaron en claro que el fútbol es uno solo y que por lo tanto, debe trabajar como tal. De esta manera el DT del equipo Integrado, Rodrigo Coria, mencionó que en su momento su gestión le permitió a Fiamma Romero, una de las integrantes del primer equipo, poder llegar a las filas de la Academia. También hubo espacio para las bromas y las risas, pero también para las preguntas y la reflexión, con eje en las temáticas de diversidad e inclusión que no escapan a la agenda actual.     

Para el cierre quedaron los agradecimientos por parte de Hernán Gliniecki y Daniel Rosello como responsables del área, al igual que de Horacio Micelli como el dirigente de la institución que representa al área dentro de la Comisión Directiva.  «Es una alegría enorme haber podido conocer a la gente de Racing Integrado. Más allá de la virtualidad, nos recibieron de la mejor manera y nos hicieron sentir una calidez que emociona. Ojalá que en un futuro puedan vernos jugar y que nosotros podamos hacer lo mismo», expresó Bacci, antes de que Piazza suscribiera a su comentario con el agregado de «agradecer a todes por habernos brindado la posibilidad de compartir, a pesar de la distancia». Además, la promesa futura de un encuentro en persona cuando la situación sanitaria lo permita ya quedó sellada. No quedan dudas de que será de esa manera. La integración desde el corazón ya es un hecho. Y con esa piedra fundacional ya colocada, no hay nada que impida el hecho de seguir construyendo.