Pudo haber sido mucho mejor que el 3-0 de la chapa final a favor de Boca. Porque Racing se plantó arriba, con determinación, ante el multicampeón de la disciplina y estableció paridad en el primer tiempo. Pero una tarjeta roja en el comienzo del segundo capítulo y una desventaja inmediata fueron complicaciones severas. Queda lo más relevante: la certeza de que el resultado no es indicio de los recursos y proyección de Racing.
El cambio es bienvenido porque opera como estímulo y como desafío. Racing lo puso en funcionamiento ante Boca, con un juego a mayor velocidad, presión alta y despliegue sostenido para recuperar rápido en la zona media y generar ataques inmediatos. Con Rocío Gómez (salió prematuramente por un corte en la cabeza), Nazarena Viola (otra de la cantera) y Tamara Hardie en ese aporte para los recobres, el equipo de Agustín Benchimol apuntó a generar superioridad númerica en la zona de volantes, mantener la posesión y despegar hacia el territorio ajeno. Boca, con varios cambios en su nómina en esta temporada, apuntó a contrarrestar la estrategia con circulación ancha. Lo logró un par de veces y llegó en profundidad, pero Julieta Blanco le frustró una chance nítida a Urbani. Con Rocío Bueno como referencia de área, Racing también inquietó a Oliveros, sobre todo con una combinación notable con Sindy Ramírez, que incluyó pisada y pase limpio que dejó a la 9 para el disparo que detuvo la arquera local.
Sin embargo, en nueve minutos la situación cambió radicalmente debido a una cadena de hechos negativos: enseguida en la reanudación (5 minutos), Bueno recibió la segunda amonestación y, con eso, el fin de su participación en el partido. Con diez en campo, los engranajes que habían encajado con precisión en la primera etapa, comenzaron a trabarse. A los 10, Viola debió salir lesionada (se le torció el tobillo izquierdo en el inicio de una carrera) y su aporte en velocidad y ayuda para el desboble ofensivo-defensivo se interrumpió. El tercer eslabón se engarzó a los 14, con el 1-0, luego de una réplica en la que se juntaron Molina, Huber y Urbani, quien definió luego de tomar un rebote (Nardone había tapado en un cruce exacto un remate que iba al gol). En inferioridad en marcador y cantidad de jugadoras, todo se hizo más arduo. Y se agravó con el misil que Preininger clavó en el ángulo superior izquierdo, a los 21 minutos, en el 2-0.
Racing jamás se rehusó al esfuerzo y procuró reducir la ventaja. Las dos derrotas en las primeras fechas ante equipos de peso histórico en nada condicionan el futuro; por el contrario, representan una oportunidad para superar la adversidad. Y este equipo tiene con qué…
1-Julieta Blanco; 4-Belén Taborda, 28-Florencia Salazar, 26-Luana Muñoz, 3-Eugenia Nardone; 33-Rocío Gomez (PT 32′ 15-Florencia Curril) (ST 24′ 31-Dlores Maregatti), 2-Melina Moreno, 10-Sindy Ramírez ; 7-Nazarena Viola (ST 10′ 16-Maricel González), 9-Rocío Bueno y 17-Tamara Hardie (ST 24′ 12-Belén Spening). DT: Agustín Benchimol. Suplentes: 23-Dulce Tortolo, 8-Serena Rodríguez, 18-Agustina Maturano, 21-Sofía Palacios, 22-Milagros Menéndez.
Goles: ST 14′ Urbani (B), 21′ Preininger (B) y 43′ Flores (B).
Amonestada en Racing: PT 33′ Bueno. ST 20′ Moreno.
Expulsada: ST 5′ Bueno (R)
Árbitra: Antonella Álvarez de Olivera.
Cancha: Complejo Pedro Pompilio.
(Prensa Racing Club)