Se cumplen cuatro años de la primera de las Visitas al Cilindro, el programa por el que han pasado más de 10.000 hinchas de todas las edades y que fuera distinguido con un reconocimiento por la Municipalidad de Avellaneda.
Han pasado cuatro años, pero la vigencia permanente, renovada cada fin de semana, renueva el compromiso y las emociones. Fue el 16 de julio de 2016 que comenzaron las visitas al Cilindro, esa cita impostergable -sólo las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio de la cuarentena determinada por una pandemia de coronavirus con alcance universal- que fue creciendo, paso a paso…
Porque aquella iniciativa impulsada por un grupo de vitalicios tuvo, como primeros destinatarios, a socios y socias de esa misma categoría y de Bodas de Oro. La demanda, creciente y constante, hizo el resto: en poco tiempo, la posibilidad de conocer en detalle la casa de los y las racinguistas y nutrirse de su gloriosa historia quedó abierta a hinchas sin distinción de edad ni de pertenencia a la masa societaria. Más de 10.000 personas ya han pasado por las entrañas del estadio y, tanta dimensión alcanzó el programa, que fue distinguido por la Municipalidad por contribuir al conocimiento de la ciudad en el Marco del plan “Descubriendo Avellaneda”.
Gerardo González, a cargo del Departamento de Vitalicios y responsable del programa que ha cobrado vida propia, en esta celebración comentó: “Nos emocionamos, disfrutamos y nos llena el alma ver la sonrisa de chicos y chicas, de un papá, una mamá, de abuelos… de cada persona al estar en nuestra casa. Eso nos sucede en cada visita y nos da una gran satisfacción poder hacerlo”.
Es un sentimiento compartido por cada racinguista, no caben dudas…
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(Racing Club)
