Sofía Robles trabaja de manera ardua y silenciosa desde hace casi un mes en la Costa Atlántica junto al Seleccionado Nacional en busca de un lugar en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio. Una misión que parecía utópica a principios del año, pero que hoy toma cada vez más fuerza desde los puños de la jóven boxeadora académica.
«Estoy preparándome de forma muy intensa y con todas las expectativas para el Preolímpico. Si se me da la oportunidad, estoy lista». Fiel a su estilo, Sofía Robles -la cuarta desde la izquierda en la foto- pega fuerte desde el inicio. En este caso, al igual que desde los albores de su carrera, la boxeadora que representa a Racing Club apunta bien alto para que sus golpes sean precisos y certeros. Pero el incentivo detrás de tantos meses silenciosos de entrenamiento ininterumpido en medio de la pandemia de coronavirus tiene un sentido agregado al que la joven púgil ya conoce desde sus primeros días en la actividad. El horizonte dorado aparece al final de un camino que apareció quizás sin pensarlo demasiado a principios de este 2020, pero que hoy ya es toda una realidad para ella: la posibilidad concreta de competir por un lugar en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio, que se pospusieron durante este año por el COVID-19 Y es esa ilusión de calibre mundial la que motiva a «Golovkina» -tal como se la conoce en referencia al célebre luchador kazajo- para prepararse de manera intensiva junto al resto de los integrantes del Seleccionado Argentino de Boxeo desde hace casi un mes.
«Para mí es muy importante estar acá entrenando con el equipo nacional. Además de ser un momento muy grato me permite seguir sumando experiencia y aprendizaje tanto en lo personal como para mi boxeo», relata la mujer de 18 años a la hora de comentar su sentir sobre el presente que le toca atravesar. Es que todo pasó muy rápido para Robles durante estos últimos meses. La deportista pasó de entrenarse en su casa de manera virtual junto al equipo racinguista de la Academia de Boxeo Horacio Accavallo a contar con una chance concreta de prepararse para buscar un lugar en Japón como representante de nuestro país. El marco de situación del deporte cambió a nivel mundial tras la proliferación del coronavirus y el pugilismo no fue la excepción. De este modo la etapa clasificatoria que iba a llevarse a cabo en Buenos Aires se postergó a finales de marzo y varias figuras tanto masculinas como femeninas que ya tenían garantizado su lugar en el equipo se bajaron de la convocatoria por distintos motivos tras la postergación de la actividad en general. Y fue en este punto en donde la figura de Robles tomó fuerza en la categoría de hasta 51 Kg. , tras haber quedado relegada en un principio ante la figura de Yésica Bopp.
La citaron y ella no lo dudó ni por un segundo. Volvió a ir al frente con la guardia bien alta y en búsqueda de un sueño que con cada día de entrenamiento se le aparece un poco más cerca. Es por eso que tras haber permanecido aislada por diez días en un hotel bonaerense y haber resultado negativa en los testeos preventivos de coronavirus, viajó junto al resto de la delegación nacional a la ciudad costera de Santa Teresita en donde se prepara desde hace casi un mes. «Sentí un poco el cambio de ritmo, pero ya me adapté a la exigencia», afirma Robles para dejar más que claro que su mejor versión está presente de nuevo, tras la readaptación física que debió atravesar para recuerar el ritmo necesario para la alta competencia. «Nos levantamos a las 7.15 y a las 8 en punto tenemos el pesaje. Luego desayunamos y entrenamos en el primer turno. Después almorzamos, dormimos una pequeña siesta y ahí encaramos la segunda parte del día a las 16», cuenta en detalle la pugilista con respecto a las labores que todo el grupo comandado por Fabricio Nieva y Daniel González realizan en la Costa Atlántica, antes de dar algunas precisiones más al respecto de las exigentes semanas que el equipo lleva a cabo con la mente puesta en el Torneo Preolímpico: «Todos los días nos entrenamos en doble turno. La parte física la hacemos de forma matutina y la parte técnica la realizamos por la tarde. Los lunes, miércoles y viernes hacemos labores aeróbicas intensas, mientras que los martes, jueves y sábados hacemos tareas de fuerza, junto a una vez por semana en la que hay guantes sobre el ring. Desde el primer día que estamos acá nos manejamos de acuerdo a los protocolos correspondientes y los respetamos sin excepción. Sabemos que es la única forma de trabajar sin dificultades», se encarga de remarcar la talentosa deportista académica.
«Todos los días estoy enfocada en cumplir mi sueño, que es estar en Tokyo», dice Sofía con fuerza una vez más. Y no quedan dudas al escuchar sus palabras: va en busca del triunfo. Una vez más y como siempre. Por eso y más allá de que el Preolímpico aún no cuente con fecha formal de realización, su competencia ya empezó. La campana ya sonó y está sobre el ring. La acción para ella y el resto del equipo seguirá en Santa Teresita hasta el próximo 8 de octubre, antes de retornar a sus respectivos hogares para seguir con la preparación específica hasta el inicio del torneo. Pero Robles también sabe que no es la única que está dando batalla hoy por hoy. La gente también está peleando fuerte ante el coronavirus y por eso, la joven no se olvida de dedicarle unas palabras a todas las personas que puedan llegar a leerla: «Mi mensaje tanto para la gente de Racing como para los atletas es que se cuiden mucho, que mantengan la distancia y que respeten todos los protocolos, pero que nunca dejen de enfocarse en sus sueños y que se sigan entrenando, porque cuando esto se termine tenemos que volver mejor que nunca».
Fotos: Boxeo Racing.
Si querés seguir informado con toda la actualidad de Racing Club seguinos en nuestras redes sociales (Twitter o Facebook), suscribite de forma gratuita de nuestro Canal de Telegram o en Google News.
(Racing Club)